En su columna, Palabras y Vínculos, María Beatriz Greco reflexionó acerca de cómo pensamos las trayectorias educativas.
La especialista destacó la importancia de ver las trayectorias de cada estudiante, en lugar de concentrarse exclusivamente en aquellos que necesiten ayuda en su aprendizaje. “Cada vez más tenemos la responsabilidad de mirar esas trayectorias con detalle. Con detenimiento, poniéndole singularidad, poniéndole un rostro a esa trayectoria. Y a la vez sabiendo que ninguna trayectoria tendría lugar si no hay una institución que la sostiene”.
Se trata de un recorrido educativo que está encarnado no solo por los estudiantes, sino también por cada uno de los docentes, “porque las trayectorias también son las nuestras. No son solo de los chicos y de las chicas. Y las trayectorias se cruzan. Cuando yo doy clases a un grupo, mi trayectoria de formación docente, y lo que he hecho toda mi vida para llegar hasta ahí tiene sentido cuando me encuentro con las trayectorias de mis estudiantes”, señaló la entrevistada.
Otras formas de ver las Trayectorias Educativas
Greco habló del ejemplo de la ex directora de la provincia de Chubut, Teresa Punta. Punta escribió el libro “Señales de Vida”, en el que hay un cuaderno de bitácora de su tiempo como directora. Greco contó que la escritora “va narrando cómo se construyó ahí un equipo de trabajo que lo que hacía era mirar esas trayectorias de cada uno de sus chicos. Y a la vez, conformaba una escuela que los alojara a todos”. A partir del ejemplo de la ex directora, la especialista se preguntó si “¿no habrá otras formas de armar trayectoria?”
Es importante que las trayectorias educativas sean sostenidas por la institución, pero no se debe dejar de mirar “quién es el que está ahí, la que está ahí. Atravesando esa trayectoria. Con una trayectoria de vida determinada. Mejor, peor, con adultos, sin adultos, con una familia que acompaña, o que no lo hace, con problemáticas muy diversas que sabemos que hoy llegan a las escuelas”.
Escuchá la nota completa acá:
